La situación de la pandemia del COVID-19, que ha estremecido al mundo, finalmente ha visto una pequeña solución con los recaudos sanitarios y con las vacunas preventivas que se han creado en distintitas farmacéuticas internacionales, pero desafortunadamente, este no es el final feliz que se estaba esperando, ya que las empresas privadas han comenzado la carrera para hacerse con miles de dosis de las fórmulas antiCOVID y al mismo tiempo, por la cadena de enfriamiento que necesitan estos nuevos medicamentos.
La Asociación Brasileña de Clínicas de Salud Privadas, han manifestado que desean acceder a las fórmulas de manera conjunta, por lo que de manera independiente ya han comenzado las negociones con la empresa farmacéutica India Bharat Biotech, con el objetivo de adquirir al menos cinco millones de dosis de su vacuna contra el COVID-19.
Por esta situación, los profesionales del vecino país han decido no esperar a las resoluciones del gobierno de Jair Bolsonaro, ya que aún no han avanzado en las negociaciones de adquisición, por la realidad que se vive en el vecino país, se necesita una solución de manera urgente, ya que los números de infección han crecido de manera espeluznante.
La Asociación Brasileña de Clínicas de Vacunas (ABCVAC), indicó en su página web, que esta es una forma de garantizar que los brasileños que utilizan el sistema de salud privado, generalmente los más pudientes, tengan acceso a una vacuna, considerando que el gobierno reserva sus propias dosis iniciales de antivirales para el sistema de salud pública, así como a los grupos prioritarios, trabajadores de la salud y ancianos. “Esta es una venta aparte que no interferirá con la cantidad de dosis de vacunas que ya ha encargado el gobierno”, expresan los miembros de la asociación.
Por otra parte, la cadena enfriamiento es una cuestión que debe ser bien atendida, para el traslado de estas vacunas, teniendo en cuenta que los países europeos, en donde el sistema laboratorial es mucho más complejo, cuando las dosis llegan a Sudamérica, comienza la problemática, situación que lamentablemente ya se vivió con 400 dosis de la vacuna rusa, Sputnik V, que perdieron el sistema de enfriamiento, por lo que se echaron a perder.
Las vacunas estaban destinadas Hospital de Oncología “Luciano Alfredo Fortabat”, de la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Las autoridades sanitarias han comenzado un proceso de investigación, ya que se habla de un posible sabotaje, teniendo ene cuenta que anteriormente recibieron 450 vacunas, que llegaron en buen estado. Esto lo confirmó el intendent Ezequiel Galli para Infobae.