Según las informaciones internacionales, el príncipe de Gran Bretaña, duque de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II, falleció pacíficamente esta mañana en el Castillo de Windsor.
El príncipe se sometió a una cirugía cardíaca en el hospital de San Bartolomé, el pasado mes de febrero, luego estaba haciendo su recuperación en el hospital King Edward VII y el 16 de marzo abandonó el sitio.
El primer ministro británico, Boris Johnson, se expresó en su cuenta de Twitter recordando al duque de Edimburgo: “El príncipe Felipe vivió una vida extraordinaria, fue un héroe naval en la Segunda Guerra Mundial, fue un hombre que inspiró a un sinnúmero de jóvenes a través de su premio Duque of Edinburgh’s Award, sobre todo, como el consorte de su majestad la reina Isabel”, escribió.
El Reino Unido comenzó un período de luto oficial que se prolongará hasta el funeral del príncipe. Por su parte, la reina Isabel II guardará luto por un periodo de ocho días, durante este tiempo la majestad no firmará ni aprobará nuevas leyes relativas al Consentimiento Real.
Al parecer, el Cementerio Real de los jardines de Frogmore, es el lugar que Felipe habría solicitado para su descanso eterno, no es la opción tradicional ya que la mayoría de los monarcas optan por la capilla de San Jorge, dentro del propio Castillo.