El resultado se debió a una rápida reacción mediante un rastrillaje que permitió encontrar la zona de plantaciones y la eliminación de la misma. Desde la institución informaron que el procedimiento forma parte de una firme decisión institucional de hacer frente a este tipo de hechos ilícitos dentro de las áreas protegidas de dominio público, que ya comenzó en el año 2019 y 2020, con operativos en el Parque Nacional Serranía San Luis y en Parque Nacional Cerro Corá.
Recientemente, también se realizó lo mismo en el Parque Nacional Ñacunday. El objetivo es desmoralizar a los que utilizan los parques nacionales para el narcotráfico e incentivar el respeto a los recursos naturales, a la biodiversidad y al ambiente.
Pese a su exiguo presupuesto anual, el Ministerio del Ambiente viene asestando duros golpes al narcotráfico, con la destrucción y quema de grandes extensiones de plantaciones ilegales encontradas dentro de las áreas protegidas, actividad que pone en peligro y atenta contra la biodiversidad del lugar utilizado para esta actividad delictiva. Esto gracias al trabajo en conjunto con otras instituciones de orden y seguridad.