Durante el proceso de gestación se puede generar vínculos fuertes con el nuevo ser que viene al mundo, de este acercamiento debe ser participado por todos los miembros del grupo familiar: papá, mamá, abuelos, hermanos. El bebé en proceso de gestación recibe toda la información que proviene del exterior, lo que le sirve de estímulos positivos, como las caricias, la comunicación hacia él o ella, la luz, la música, todo esto produce un efecto benéfico en el desarrollo.
La crianza positiva es un conjunto de acciones que realizan los padres y cuidadores de las niñas y niños, que brindan estructura y límites con respeto y amor a los pequeños. La estructura se genera con las pautas y rutinas diarias, las criaturas necesitan tener un contexto predecible, por ejemplo: cada día se les despierta con respeto, se le orienta para que inicie el día con la rutina de higiene, desayuno y hábitos saludables, luego se propicia el juego, la interacción, etc.
Los límites con amor se dan a través del conocimiento de las etapas evolutivas del niño, por ejemplo, sería inapropiado frenar a un niño pequeño de dos años que quiere correr, está desarrollando sus habilidades motoras y lo necesita, en todo caso, sería apropiado generar un espacio en el que pueda hacerlo sin riesgos.
Existen periodos, como la gestación, parto, lactancia, y primera infancia (0-8 años del niño) en los cuales el rol del padre como apoyo a la mujer y al niño, cobra una relevancia determinante para el desarrollo integral de la infancia y la salud de todos los miembros de la familia. Es importante mencionar que, en los servicios de salud el hombre también encuentra atención integral para él.
El bienestar integral de la salud se sustenta en la prevención de toda forma de violencia y en la responsabilidad compartida. En todo el curso de vida es relevante promover el buen trato, la corresponsabilidad en la crianza y cuidado de los hijos y personas dependientes de las familias, así como también la prevención de toda forma de violencia.
Es determinante prevenir toda forma de violencia, malos tratos o estrés hacia la mujer en proceso de gestación. Se aconseja, promover hábitos saludables en el hogar para crear un buen clima, se puede realizar actividades físicas apropiadas para esta etapa, acudir a los controles prenatales, compartir con otras mujeres que están en proceso de gestación, hablar con personas de confianza, buscar ayuda ante cualquier situación de violencia (SOS Mujer, 137 o Policía Nacional, 911).