Rubén Capdevila, ministro de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), se reunió con Luz Borja, directora de la Escuela-Taller de Luthería Borja, los mismos conversaron sobre los detalles de un proyecto para rescatar el patrimonio inmaterial y material de los pueblos originarios del Paraguay.
Según explicó Borja, con el proyecto impulsado se busca investigar, recrear y reconstruir con los pueblos cada instrumento que representa su acervo y su historia.
“La reunión consistió en la presentación de este proyecto, de su importancia, su pertinencia y lo que significa para Paraguay contar con una base de datos de los instrumentos musicales de los pueblos originarios de nuestro país”, mencionó la mujer.
Finalmente, explicó que el encuentro fue positivo, “considerando que la línea de trabajo de la SNC, tiene que ver con el patrimonio cultural y este proyecto engloba estos bienes materiales e inmateriales”.
Los instrumentos musicales indígenas surgieron a partir del material disponible en cada región. Las calabazas se convirtieron en sonajas, los dientes y pezuñas de animales en sonajeros, las tacuaras en flautas y bastones sonoros, y los troncos huecos en tambores.
En las presentaciones públicas en contextos interétnicos, el canto y la danza suelen acompañarse con el instrumento guía mba'epú («guitarra») y con el hy'akuá parã («sonaja»). La ravé (violín guaraní) y el angu'á pú (tambor artesanal) también son usados muchas veces y, más raramente, el popyguá (claves rituales).