El padre junto a los abuelos de la pequeña, acudieron hasta el Hospital San Pablo, donde vieron nacer a Cristiane, para agasajar y agradecer en nombre de la madre todo el esfuerzo que hicieron para salvar su vida.
La mujer falleció de un derrame cerebral causado por el coronavirus, tras días de estar internada, luchando contra la enfermedad, no resistió. Los médicos tuvieron que realizarle una cirugía de urgencia para sacar a la niña de su vientre. La beba permaneció tres meses internada bajo cuidados especiales, ya que tan solo nació con 700 gramos.
Pese a la pérdida que tuvo la familia con el fallecimiento de la gestante, hoy pueden tener felicidad mediante la vida de la menor, que se aproxima a su un año de vida, el siguiente 2 de enero.
“Estoy demasiado feliz con mi hija y vinimos con mi familia para agradecer a todo el equipo médico por lo que hicieron en especial al área neonatal que tanto dio por mi hija prematura”, expresó don Julio en una entrevista con NPY.