Varias instituciones del gobierno: MINNA, EDUCACIÓN, SALUD, entre otras presentaron “Mirame”, una historieta que pretende trabajar en la concienciación y prevención del abuso y la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes.
La presentación del cuento forma parte de las acciones de las autoridades para sensibilizar y reflexionar sobre el tema que afecta a tantas familias en todo el país.
Esta guía cuenta con recursos diferenciados para grupos de niñas, niños y adolescentes y para padres, madres y encargados de crianza. A la par, dispone de orientaciones para ser aplicada tanto en encuentros presenciales como virtuales. La primera edición de Mirame incluye 30 000 ejemplares que serán distribuidos de forma gratuita.
Teresa Martínez, ministra de la Niñez y la Adolescencia, mencionó que la familia tiene el rol esencial en la protección de los menores y el Estado interviene cuando eso no se cumple. “Nosotros estuvimos realizando distintas estrategias para prevenir esto que nos marca tanto como ciudadanía, como país, que son los números de abusos sexuales de los que son víctimas tanto niñas como niños y adolescentes”, indicó.
Resaltó que hay un involucramiento ciudadano, y este año fue esencial para visibilizar al abusador. “En esto estamos enmarcados todos los ministerios que estamos aquí presentes, en algunos casos unos más involucrados que otros, pero cada uno en el marco del trato que tiene con los niños”, prosiguió diciendo.
Por su parte, Julio Borba, ministro de Salud, dijo que “el abuso sexual es una cuestión de salud pública porque embarga el presente de la niñez y la adolescencia, compromete su salud integral y el desarrollo sostenible del país, y es a la vez una de las peores formas de maltrato infantil que están reguladas y penadas en el marco jurídico paraguayo”.
Dijo además que el abuso sexual supone una experiencia traumática para la víctima, interfiriendo en su adecuado desarrollo que repercute negativamente tanto en su estado físico, psicológico y social. “Las consecuencias derivadas del abuso sexual perduran a lo largo de la vida afectando no solo a quien lo padece y a sus familias, sino a la sociedad en su conjunto. En salud mental se detectan a personas adultas que fueron víctimas de abuso sexual durante la infancia y que presentan secuelas importantes relacionadas directamente con los abusos", remarcó.
Los esfuerzos también se concentran en desnaturalizar dichas situaciones, sensibilizando sobre la necesidad de abordar este tema como algo real, cercano y muy grave, que no puede seguir ocurriendo ni quedar impune. De allí la importancia de realizar la denuncia ante cualquier sospecha de abuso sexual en las líneas 911 y 147 Fono Ayuda.