En su segunda jornada, Nueva Alianza XXXI, ya cuenta con hallazgos significativos, además de unas 57 hectáreas anuladas en las incursiones, 4 complejos de producción de la droga equipados para operar de forma industrial, con mecanismos que colaboraban a la optimización procesamiento de toneladas de la droga.
Las 57 hectáreas que conformaban la superficie ilícita erradicada corresponden a la zona del Cerro Sarambí, las mismas equivaldrían a la eliminación de 171 toneladas de marihuana.
Así mimo un total de 42 campamentos fueron eliminados, mientras que unos 12 mil kilos de la droga picada resultaron destruidas.
Los narcotraficantes disponían de 4 campamentos que contaban con herramientas e instalaciones eléctricas que elevaban la capacidad de la producción. Los centros se funcionaban con un sistema regadío automático, tambores con fuentes de calor a leña para acelerar el secado entre otros instrumentos. En estas dos primeras jornadas el perjuicio el narcotráfico asciende a medio millón de dólares americano.