Los diputados nuevamente entran en una encrucijada y se pone a prueba de vuelta el corporativismo que les caracteriza, por un escándalo que tiene como protagonista al liberal Carlos Portillo. Se filtraron varios audios en los que el parlamentario aparentemente negocia nombramientos y expedientes, y ya hay amenazas de expulsión.
“Una más del colega Carlos Portillo. Basta ya. Plantearé su pérdida investidura. La Cámara de Diputados no debe seguir siendo cómplice”, fue el anuncio que hizo en las redes sociales el colorado Ramón Romero Roa. Prácticamente pasó por alto que la Cámara Baja ya había salvado a sus correligionarios que están en la mira de la justicia Ulises Quintana, Tomás Rivas y Miguel Cuevas, al igual que Portillo.
“Propongo que cada uno saque su basura. Sacá primero la basura de tu casa, Ulises, Cuevas, Rivas. No vengas a hacerte el decente a costa de Portillo. Yo pedí que se lo saque hace mucho, y con votos colorados lo mantuvieron”, fue la respuesta que recibió Romero Roa de su colega liberal Celeste Amarilla.