El presidente Mario Abdo Benítez está por completar su periodo de mandato y evalúa la continuidad de sus ministros. Muchos son cuestionados por la falta de rendimiento y no cuentan con respaldo político. En Palacio admiten que hay presiones internas.
“El presidente siempre está revisando todo lo que ocurre y está trabajando para corregir las cosas que eventualmente salen mal. Cualquier tarea humana siempre puede salir mal y se trabaja para mejorar lo que está bien”, apuntó el ministro Juan Ernesto Villamayor, jefe de Gabinete Civil.
Sobre el acercamiento del presidente con Horacio Cartes para lograr la unidad partidaria, Villamayor dijo que no le consta que haya presión de cambios de ministros por parte del ex presidente. “No en ese diálogo pero si veo que hay críticas y hay mucha gente que habla de la necesidad para tomar una decisión, el 15 de agosto. Cada uno lo hace en forma individual”, dijo al tiempo de reiterar que de ese dialogo no le consta que surja una condicionante de hombres. Entre los integrantes del Gabinete mas cuestionados están Eduardo Petta (Educación) con voto de censura tras el golpe politico del Congreso. La ministra Carla Bacigalupo (Trabajo).
En relación a la gestión de Julio Mazzoleni al frente de Salud, el jefe de Gabinete reconoció que se desgastó su imagen administrativamente. Aseguró que no se cuestiona su política ni las decisiones tomadas en el área de salud.
“No podría negar que Salud tuvo un embate muy duro desde el punto de vista de administración. Eso no se puede negar. Y fue criticado, el hecho de que el ministro de Salud tenga una ejecución en el orden del 4%”, aseveró.
Sostuvo que se puede revertir trabajando para mejorar. Asevero que no hay críticas en la parte misional en la cartera sanitaria. “Veo que hay mucha gente que critica en la parte administrativa y tiene razón. Tememos que pensar en separar al administrador del ministro porque ser buen médico no quiere decir ser buen administrador”, apuntó.