Los colorados hábilmente se encargaron de copar los espacios de poder que son claves, y eso quedó en evidencia con la amenaza de juicio político al presidente de la República Mario Abdo Benítez. Finalmente, la mayoría que responde al partido de gobierno de la mano de Horacio Cartes logró salvar el pellejo al mandatario y a su segundo en el cargo.
Cuando se dieron las manifestaciones ciudadanas como parte de la protesta contra el Gobierno por el colapso sanitario y la crisis económica, en medio de la pandemia, la exigencia era que se vayan ambos representantes del Ejecutivo, es decir no solo Marito, sino también el vicepresidente Hugo Velázquez.
En la hipótesis de que esto hubiera ocurrido, los que están en la línea de sucesión son todos colorados, comenzando por el presidente del Congreso, Oscar Salomón. Le siguen, el de Diputados, Pedro Alliana, y el de la Corte César Diesel. No obstante, al menos por el momento, ninguno de ellos tiene todavía posibilidades, ya que Mario Abdo y Velázquez continúan en sus respectivos cargos.