Una mayoría en el Senado que pactó la reelección del colorado Oscar Salomón al frente del Congreso, posibilitó el blanqueo de los colorados Javier Zacarías Irún y Rodolfo Friedmann, además de Sixto Pereira del Frente Guasu. Finalmente, los tres pedidos de pérdida de investidura se rechazaron y se remitieron al archivo.
Hubo una serie de cuestionamientos por parte de los parlamentarios que objetaron el procedimiento, y hablaron de impunidad. No corrió la posibilidad de que se llame a un cuarto intermedio de 24 horas para el tratamiento de los pedidos de expulsión. Es que los votos ya estaban cantados para salvar a los acusados.
Stephan Rasmussen, de Patria Querida, consideró una falta de respeto a la Constitución Nacional. Juan Carlos Galaverna, de la ANR, sostuvo que no iba a participar de “la sesión lavandina”. Y así se fueron sumando los representantes de otros sectores como el PLRA y Hagamos, que optaron por desconectarse de la sesión en señal de protesta.