¿Volverán los senadores expulsados?
En medio de la indefinición de la pérdida de investidura de Rodolfo Friedmann y la presentación de un proyecto de expulsión de Javier Zacarías Irún, en el Senado se plantea que se anulen las resoluciones que dejaron fuera de sus bancas a Dionisio Amarilla, Paraguayo Cubas y María Eugenia Bajac. Los proyectistas son los liberales Zulma Gómez y Enrique Buzarquis, quienes plantearon sus propuestas por separado.
Dos son los proyectos de resolución presentados por Zulma, quien aboga por sus correligionarios Amarilla y María Eugenia. En el caso de Buzarquis pide que Payo Cubas vuelva a ocupar la banca. En lo que coinciden ambos senadores es que no correspondía aplicar la máxima sanción de pérdida de investidura.
Amarilla fue expulsado de la Cámara Alta el 6 de junio de 2019, luego de que haya salido a luz una grabación en la que supuestamente el liberal estaba haciendo uso indebido de sus influencias para que una empresa de seguridad se quede con una licitación en el Instituto de Previsión Social (IPS). Zulma dijo que todo formó parte de una campaña del presidente de su partido, Efraín Alegre, quien hoy está imputado por manejos irregulares y desvío de fondos.
La senadora señaló que no tiene inconvenientes en reconocer que también se podría analizar el caso "del excéntrico senador Paraguayo Cubas, quien también a pesar de contar con el respaldo de la voluntad popular fue destituido".
En cuanto a Bajac, Zulma mencionó que fue expulsada del Senado el 14 de abril del 2020. Alegó que luego de cinco meses de una serena reflexión entiende que la decisión fue injusta, y que la sanción aplicada no condice con la acusación en su momento, además de haberse aplicado un procedimiento "exprés", en comparación a otros casos.
Buzarquis pidió la anulación de la resolución del 28 de noviembre de 2019, en la que el Senado dejó sin banca a Payo Cubas. Señaló que la decisión fue injusta, arbitraria e ilegal, en perjuicio de un colega que no cometió en ningún momento ninguna de las causales previstas para la pérdida de investidura.
"La falta de compostura y la trasgresión al reglamento interno como alegaban los apreciados colegas al momento de plantear la sanción no son causales para la aplicación de la máxima sanción prevista para un senador por lo que corresponde que ocupe su banca", indica en su proyecto.